Capitulo 24

Ya habia caminado un par de cuadras cuando el
sonido de un claxon me saco de mis
pensamientos. Se estaciono a mi lado y del auto salio Facundo.

-- Pense que no te encontraria.-- Tomo mis
pertenencias y lo detuve
-- Que haces?
-- Te llevare a un lugar seguro.-- No hice nada
mas, el llevo mis cosas hasta la parte trasera del auto y me ayudo a subir del lado del copiloto.

Puso en marcha el auto mientras veia por la
ventana, no sabia que hacer, a donde ir o
pensar... eran demasiadas cosas las que pasaban por mi mente.-- Pau.-- Voltee, me saco de mis pensamientos, el se veia algo extraño, preocupado, triste y hasta un poco decepcionado, quiza por las palabras que su madre habia utilizado para llamarme a mi y a mi hijo.-- No se como... como empezar.
-- Que pasa, Facundo?.-- Bufo y estaciono el auto enfrente del hotel mas lujoso de la ciudad.-- Que hacemos aqui?
-- Te reservare un par de noches mientras
pensamos que hacer.-- Pensamos? Eso me sonaba a mas de una persona y la unica que tenia que pensar en que hacer era yo.

Bajo del auto y tambien el equipaje, enseguida un "botones" ayudo con el equipaje mientras el me tomaba de la mano para entrar a aquel sitio.

Era extremadamente lujoso, habia una tenue
musica de fondo en el que se identificaba
solamente el piano. Pinturas, grandes espejos y una alfombra roja hasta llegar a la recepción.

-- Buenas tardes.-- Saludo una señorita con una
gran sonrisa.-- Puedo ayudarles a algo?
-- Quiero una habitacion. La mejor que tenga.-- La chica sonrio y empezo a teclear en su
computadora.
-- Cuantas noches?.-- Facundo me observo y yo le regrese la mirada llena de dudas, porque hacia eso?
-- Dos, probablemente tres, pero solamente quiero reservarla por dos.-- La recepcionista asintio, tomo mis datos, y me dio una tarjeta para poder abrir la habitacion.

El chico que cargaba el equipaje ya habia llegado.

Todo tenia un aspecto demasiado elegante para mis fachas pero no tenia mas que aceptar lo que Facundo estaba haciendo ya que... estaba sola en el mundo. Dio algo de propina al chico y cerro la puerta de la extremadamente grande habitacion.

-- Puedes tomar lo que sea de aqui.-- Menciono al abrir un pequeño refrigerador que estaba del lado derecho de la cama.

Me tomo de la mano y me hizo sentar en la cama.
-- Te prometo pagar todo cuando...
-- No tienes que pagar nada.-- Menciono mientras curvaba la comisura de sus labios.-- Me siento tan mal que...-- suspiro.-- disculpame por favor por el daño que te he hecho, Paula.
-- Tu solo has tratado de ayudarme
-- No Pau, me he convertido en mi madre y no
soporto esto... Disculpame por favor, perdoname por todo lo que te he hecho... empezando por aquella noche que te pedi...
-- No digas nada, Facundo, gracias ahora porque sin ti no se a donde hubiese ido.
-- Que piensas hacer?, que quieres que haga para ayudarte?
-- Te agradezco de nuevo tu preocupacion pero... ya no necesito mas, me abrire camino yo sola.
-- Pero... con quien iras, te rentare un
departamento mientras...
-- No, de verdad, puedo sola, Facu gracias pero haz hecho mas que suficiente y ahora solamente me queda ver mi propia realidad, saldre adelante.-- Afirme sonriendo.-- No solamente por mi, sino por mi hijo.
-- La propuesta que anteriormente te hice sigue en pie Pau.
-- Si algun dia cambio de parecer te lo hare saber, mientras tanto gracias Facundo.-- Sonrio y beso pausadamente mi mejilla.

Se puso de pie y camino hasta la puerta, al abrirla volteo su cuello y con una mirada nostalgica pronuncio.

-- Espero me perdones algun dia.-- Antes de que preguntara "de que?" cerro la puerta y me quede alli pensando, que debia de perdonarle, lo de aquella noche?,
que no me defendiese de su madre?... Ahora
gracias a él no estaba en la calle.

Sabia lo que tenia que hacer, si tenia alguien que probablemente me ayudaria, que aunque odiaba con todo mi ser, podria ser la unica persona que pudiera sacarme del hoyo. Mi padre.

Despues de pasar una noche llena de preguntas sin respuestas, me levante, me bañe y parti hasta el trabajo donde segun mi mama, trabajaba el señor que me habia engendrado.
Le di la direccion al taxista y al llegar quede impresionada con el lugar. Era un edificio inmensamente alto, casi como un rascacielos. Entre y pude ver a muchas
personas con portafolios de un lado a otro.
Llegue hasta recepcion y una señorita con cara
amigable me atendio

-- Puedo ver al Señor Miguel Chaves?.-- La señorita se quedo mirandome unos segundos y despues pregunto:
-- Tiene cita?.-- Negue.-- Lo siento no puede pasar con el Lic. Chaves sin cita señorita
-- Digale que necesito verlo, es urgente, soy su...
soy Paula Sh... Paula Chaves Schultz.
-- Chaves Schultz?.-- Fruncio el ceño.-- Usted es la hija de...-- Casi dejo su mandibula caer y me hizo una seña de que esperara un momento, tomo el telefono y al parecer marco hasta donde estaba mi... padre.-- Lic. Chaves, sé que no puedo molestarlo pero aqui hay alguien importante que
necesita verlo.-- Asintio para si misma un par de veces.-- Se trata de la Señorita Paula Chaves
Schultz, perfecto, enseguida la dirigo hasta usted-- Colgo el telefono y se puso de pie.-- Señorita sigame por favor.-- Asenti.-- Por favor disculpeme por no haberla pasado
antes pero yo no sabia que...
-- No te preocupes.-- Dije sonriente.-- Esta bien
-- No, claro que no, la proxima vez sera diferente,el Lic. Chaves es muy querido y respetados por todos aqui, asi que usted es exactamente lo mismo.-- Toco la puerta y asomo su rostro, asintio y despues me dejo el paso para que entrara.
-- Gracias.-- Susurre, ella sonrio y cerro la puerta dejandome alli dentro sola con aquel hombre de cabello casi completamente blanco que estaba de espaldas a mi.
-- Soy...

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